El lavado de manos es una manera simple pero poderosa de ayudar a su niño a mantenerse saludable. Establecer hábitos saludables para el lavado de manos en la niñez es clave para ayudar no solo a su pequeño, sino también a toda su familia a detener la propagación de los gérmenes dañinos que causan enfermedades.
Las manos de tu bebé pueden meterse en cualquier lugar llenos de gérmenes a diario lo cual los expone a contraer enfermedades. Afortunadamente, lavarse las manos con frecuencia puede ayudar a eliminar estos gérmenes y de esta manera no se necesitaras limtar su diversión para mantenerlo saludable.
Cuando se les enseña a los niños —particularmente a niños pequeños— sobre el lavado de manos, es muy importante que se lo haga de una manera divertida y que los recompense cuando lo hacen bien.
Se puede usar una tabla de stickers para monitorear cada vez que se lavan sus manos correctamente, y una vez que tienen cierto número de pegatinas dele recompensa, puede darles un regalo especial para ayudarlos a mantenerse por el buen camino.
Es realmente importante que incorpore una rutina de lavado de manos saludable no solo para mantener a su niño saludable, sino también a toda su familia.
Lavarse las manos no es solo frotarlas rápidamente con jabón. Es por eso, que hemos incorporado una guia de ayuda para mantener las manos saludables y libres de gérmenes.
Lavado de manos
Los tres puntos clave para hacerlo bien son lavarse las manos:
- Antes de comer cualquier alimento.
- Luego de ir al baño o de usar la pelela.
- Antes de ayudar en la preparación de cualquier comida.
Lavado de manos divertido
¿Sabías que para lavar tus manos necesitas tomarte entre cuarenta segundos y un minuto para limpiarlas correctamente?. Una forma de hacerlo entretenido es cantar el Feliz cumpleaños dos veces seguidas lo cual le dará el tiempo que necesita para hacer lavarse las manos correctamente. Otra forma es mostrarle formas que puede hacer con sus manos y hacer que las copie.
Pasos para un correcto lavado de manos
- Moje las manos con agua limpia y tibia.
- Aplique una pequeña cantidad de jabón.
- Frote las palmas entre sí —fuera del agua—.
- Frote los dedos y los espacios entre ellos.
- Frote las uñas contra las palmas
- Frote el dorso de cada mano.
- Enjuague con agua corriente limpia.
- Séquelas con una toalla o toalla de papel limpias.
- Elogie a su hijo por hacerlo bien. Recuerde el dicho "una acción que se recompensa es una acción que se repite".
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